• En línea con el programa económico de la nueva administración nacional presentado por el Ministerio de Economía, a mediados de diciembre el BCRA definió el nuevo marco de política monetaria y cambiaria y sobre el cierre del año publicó los objetivos y planes respecto del desarrollo de las políticas monetaria, cambiaria, financiera y crediticia para el año 2024.
• El programa económico tiene como piedra angular eliminar el déficit fiscal y su financiamiento con emisión monetaria. Otros de los elementos centrales son la eliminación de regulaciones, restricciones y trabas burocráticas, y la corrección de precios relativos, en especial, el tipo de cambio. También se busca la recuperación del nivel de reservas internacionales a partir de la normalización de los flujos de comercio exterior. En diciembre el BCRA comenzó a transitar hacia la consolidación de las herramientas de política monetaria para orientarlas a lograr la estabilidad monetaria y reducir la inflación. Se dispuso que la tasa de política monetaria sea la de los pases pasivos para el BCRA, fijándola en un nivel de 100% (TNA). A su vez se dejó de realizar licitaciones de LELIQ, pasando a ser las operaciones de pases el principal instrumento de absorción de excedentes monetarios. Dejar de emitir LELIQ es un paso importante para que las entidades tengan incentivos para actuar como intermediarios financieros que toman depósitos para dar crédito.
• En diciembre el saldo de financiamiento en pesos al sector privado disminuyó en términos reales, con reducciones generalizadas entre los grupos de entidades financieras y las asistencias crediticias. En una comparación interanual, el saldo de crédito en pesos al sector privado se contrajo 23,7% en términos reales.
• El ratio de irregularidad del crédito al sector privado cerró 2023 en 3,7%, aumentando 0,5 p.p. i.a. El indicador de morosidad de los préstamos a las empresas alcanzó 4,4% en diciembre, mientras que la mora de las financiaciones a las familias se situó en 2,8% de la cartera.
• Entre puntas de mes el saldo de los depósitos en pesos del sector privado se incrementó en términos reales, fundamentalmente por la estacionalidad propia de las cuentas a la vista. No obstante, en términos interanuales el saldo de los depósitos del sector privado en pesos acumuló una reducción de 22,8% a precios constantes.
• Sobre fines de 2023 los indicadores de liquidez continuaron siendo elevados para el sistema financiero agregado. Los activos líquidos en sentido amplio del conjunto de entidades ascendieron a 88,6% de los depósitos en diciembre, aumentando en el mes y en una comparación interanual.
• Los ratios de solvencia del sistema financiero también se mantuvieron en niveles altos en el cierre del año. Las entidades financieras integraron capital por el equivalente a 32,4% de los activos ponderados por riesgo (APR) en diciembre, superior al registro del mes previo y de diciembre de 2022. En el período la posición de capital (integración de capital menos exigencia mínima normativa) del sistema financiero totalizó 302,7% de la exigencia en diciembre y 60,2% del saldo de crédito al sector privado neto de previsiones.
• El sistema financiero cerró 2023 con resultados totales integrales en moneda homogénea equivalentes a 5,4% del activo (ROA) y a 27,6% del patrimonio neto (ROE). Estos niveles fueron superiores a los registrados en los 3 años precedentes.
• En 2023 los pagos electrónicos minoristas crecieron impulsados por los avances tecnológicos, mayor demanda y las acciones implementadas por el BCRA. En el año se destacó el crecimiento de las transferencias inmediatas, con un aumento del 36,5% en el volumen operado en términos reales y del 118% en la cantidad de operaciones.
Miércoles 21 de febrero de 2024