Invitamos a leer la nueva nota de Ideas de Peso, el espacio en el que los economistas que trabajan en el BCRA comparten su opinión:
En los últimos años la inclusión financiera ha ganado terreno en el contexto internacional, no sólo como un fenómeno que permite la inserción de las personas al sistema financiero, sino como una herramienta capaz de aportar beneficios que trascienden lo económico.
Ante este panorama, cabe resaltar que en el mundo existen alrededor de 2.000 millones de adultos, el equivalente a casi el 40% de la población, que no poseen acceso a una cuenta básica1. Esta distribución no es equitativa: en las economías desarrolladas, la tasa de penetración de una cuenta básica es casi universal (94%), mientras que, en los países en desarrollo, un poco más de la mitad de la población adulta posee este instrumento (54%). Entre los motivos que se señalan para explicar esta situación, se mencionan: la falta de dinero suficiente, la proximidad a un proveedor de servicios financieros, la carencia de documentación necesaria, la ausencia de confianza en los proveedores de servicios financieros y la religión.
11 de diciembre de 2017