Puede ser que el banco te haya bloqueado la tarjeta y/o inhabilitado el acceso a tu homebanking por cuestiones de seguridad (ej.: sospechas de fraude, olvido de clave, etc.). En todo caso, deberá informártelo por mail o teléfono en el mismo día, explicándote los motivos de dicho bloqueo.
Para volver a habilitar tu tarjeta, podés hacerlo por medios electrónicos y en cualquier sucursal.